HOGARKIDS

Químicos a los que exponemos a los niños en casa

¿Te inquieta no saber cuáles son los químicos a los que exponemos a los niños en casa? A continuación, te mencionaré algunos de los productos químicos comunes a los que los niños pueden estar expuestos en casa, las razones por las que están presentes y cómo se pueden eliminar o reemplazar.

Químicos a los que exponemos a los niños en casa:

  1. Limpiadores domésticos: Muchos limpiadores convencionales contienen sustancias químicas tóxicas, como amoníaco, blanqueadores clorados, ftalatos y formaldehído. Estos productos pueden ser peligrosos si se ingieren o se inhalan sus vapores. Para eliminarlos, puedes optar por productos de limpieza naturales o hacer tus propios limpiadores caseros utilizando ingredientes como bicarbonato de sodio, vinagre blanco, limón y agua.
  2. Pesticidas: Los pesticidas se utilizan comúnmente en jardines y áreas exteriores para controlar plagas y malezas. Sin embargo, pueden ser perjudiciales para la salud de los niños si entran en contacto con ellos o los inhalan. Para reducir la exposición a pesticidas, considera alternativas naturales de control de plagas, como la rotación de cultivos, la introducción de insectos beneficiosos y el uso de productos orgánicos certificados.
  3. Productos de cuidado personal: Muchos productos de cuidado personal, como champús, jabones, cremas y lociones, contienen ingredientes químicos dañinos como parabenos, ftalatos y sulfatos. Estos productos pueden absorberse a través de la piel y pueden causar problemas de salud a largo plazo. Opta por productos de cuidado personal naturales u orgánicos que estén libres de químicos dañinos. Los aceites esenciales y los productos relacionados a ellos pueden ser una buena opción
  4. Plásticos: Los juguetes y recipientes de plástico pueden contener ftalatos y bisfenol A (BPA), que son disruptores endocrinos conocidos. Estos productos químicos pueden filtrarse en los alimentos y líquidos, especialmente cuando se calientan. Trata de evitar el uso de plástico en la medida de lo posible, especialmente para los objetos que estarán en contacto con alimentos o que los niños manipularán. Opta por recipientes de vidrio o acero inoxidable y busca juguetes hechos de materiales naturales, como madera.
  5. Pinturas y productos de acabado: Algunas pinturas y barnices pueden contener compuestos orgánicos volátiles (COV), que emiten vapores tóxicos durante y después de la aplicación. Estos vapores pueden ser perjudiciales si se inhalan. Al seleccionar pinturas y productos de acabado, elige opciones con etiquetas de bajo contenido de COV o sin COV. Asegúrate de ventilar adecuadamente el área durante y después de la aplicación.

Recuerda que siempre es importante leer las etiquetas de los productos y buscar alternativas más seguras. Además, mantener una buena higiene en el hogar, como lavarse las manos regularmente y limpiar regularmente las superficies, también puede ayudar a reducir la exposición a químicos tóxicos.

 

¿Cómo eliminar o reemplazar los químicos en casa?

  1. Ambientadores y fragancias artificiales: Los ambientadores y las fragancias sintéticas a menudo contienen ftalatos y otros compuestos químicos que pueden afectar la calidad del aire interior. En lugar de usar ambientadores químicos, puedes optar por alternativas naturales como aceites esenciales, velas de cera de abejas o simplemente abrir las ventanas para permitir la circulación de aire fresco.
  2. Productos de lavandería: Los detergentes y suavizantes de ropa convencionales pueden contener fragancias artificiales, colorantes y conservantes que pueden causar irritación en la piel y problemas respiratorios. Considera cambiar a detergentes y suavizantes de ropa naturales, sin fragancias sintéticas ni químicos agresivos. También puedes probar métodos de lavandería más naturales, como usar bolas de lana para suavizar la ropa y agregar bicarbonato de sodio como desodorante natural.
  3. Productos de control de insectos: Los insecticidas en aerosol y los repelentes de insectos pueden contener ingredientes químicos tóxicos como permetrina y DEET. Para proteger a tus hijos de los insectos, elige opciones más seguras, como repelentes naturales a base de aceites esenciales o barreras físicas, como mosquiteras en las ventanas y redes para cunas.
  4. Productos de bricolaje y manualidades: Algunos materiales utilizados en proyectos de bricolaje y manualidades, como pegamentos, pinturas acrílicas y marcadores permanentes, pueden contener solventes y compuestos tóxicos. Busca opciones de pegamentos no tóxicos a base de agua, pinturas y marcadores naturales para niños, y asegúrate de que el área esté bien ventilada mientras se realizan estas actividades.

Recuerda que cada hogar es único, por lo que es importante evaluar los productos químicos a los que exponemos a los niños en casa y tomar medidas para minimizar su presencia. Siempre que sea posible, busca alternativas naturales y orgánicas, lee las etiquetas de los productos y mantén una buena ventilación en el hogar para reducir la exposición a químicos tóxicos y crear un entorno más seguro y saludable para tus hijos.

 

Otros químicos a los que los niños pueden estar expuestos en casa y cómo eliminarlos o reemplazarlos

  1. Formaldehído: Este químico se encuentra en muchos productos para el hogar, como muebles, alfombras, cortinas, colchones y productos de madera prensada. El formaldehído puede liberar vapores tóxicos en el aire interior, lo que puede causar irritación en los ojos, la nariz y la garganta, así como problemas respiratorios a largo plazo. Para reducir la exposición, busca muebles y productos certificados como de baja emisión de formaldehído o elige materiales naturales como la madera maciza.
  2. Plomo: Aunque se han tomado medidas para reducir la exposición al plomo, aún puede encontrarse en algunas casas más antiguas en forma de pintura descascarada o polvo. La exposición al plomo puede ser especialmente peligrosa para los niños, ya que puede afectar su desarrollo neurológico. Si vives en una casa antigua, asegúrate de que la pintura esté en buenas condiciones y, si es necesario, consulta a profesionales capacitados para su remoción segura.
  3. Productos electrónicos: Los dispositivos electrónicos, como teléfonos, tabletas, computadoras y televisores, pueden contener químicos tóxicos como retardantes de llama bromados, mercurio y plomo en sus componentes. Limita el tiempo que los niños pasan frente a las pantallas y, cuando sea posible, elige dispositivos electrónicos que cumplan con los estándares de eficiencia energética y sean fabricados con materiales más seguros.
  4. Retardantes de llama: Estos productos químicos se utilizan comúnmente en muebles, alfombras y productos electrónicos para retardar la propagación del fuego. Sin embargo, algunos retardantes de llama pueden ser disruptores endocrinos y se han relacionado con problemas de desarrollo y salud. Busca muebles y productos electrónicos sin retardantes de llama, o elige opciones que utilicen retardantes más seguros, como los retardantes de llama a base de fosfato.
  5. Cosméticos y productos de cuidado personal: Los productos de belleza y cuidado personal, como maquillaje, esmalte de uñas, lociones y protectores solares, a menudo contienen una variedad de químicos tóxicos, incluidos los parabenos, ftalatos y triclosán. Opta por marcas que ofrezcan opciones libres de químicos dañinos o busca alternativas naturales y orgánicas.

Recuerda que cada hogar es diferente, y la exposición a productos químicos puede variar. Lo más importante es estar informado, leer las etiquetas de los productos, investigar y tomar decisiones conscientes al elegir productos para el hogar. Prioriza la seguridad y la salud de tus hijos al buscar alternativas más seguras y reducir la exposición a químicos tóxicos en la medida de lo posible.

Deja una respuesta